 No sabemos si sentir lástima, si morirnos de risa o simplemente asombrarnos. Porque eso de ver perritos ojones viviendo en una ciudad, no es algo que se vea todos los días. Y menos si son parte de un libro infantil antiguo.
No sabemos si sentir lástima, si morirnos de risa o simplemente asombrarnos. Porque eso de ver perritos ojones viviendo en una ciudad, no es algo que se vea todos los días. Y menos si son parte de un libro infantil antiguo.VER LA HISTORIA DE LOS PERRITOS OJONES
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
